Antes de dar respuesta a la pregunta que da título a este artículo en base a consejos para una conducción segura, ya sea sobre lluvia o en cualquier circunstancia, la mejor manera de asegurarte de que vas a conducir con condiciones de seguridad es mantener tu coche en perfecto estado. No cometas el error de pensar que todo está bien por el hecho de que subes a él todos los días y no ha habido ningún problema. Hay ocasiones en las que los fallos no avisan y estos pueden dar lugar a accidentes que, en el peor de los casos, pueden tener fatales consecuencias. Por eso, cuida tu vehículo con frecuencia y respeta todas las revisiones para gozar de la máxima tranquilidad. En Hermanos Viñarás ponemos a tu alcance un taller especializado con el mejor equipo humano y la máxima calidad en el servicio prestado. Te ayudamos a conducir de forma segura con lluvia.
¿Quieres saber cómo conducir de forma segura con lluvia?
- Conduce con prudencia: La lluvia puede hacer que el coche resbale en cualquier momento, sobre todo si se va a gran velocidad. Por eso, lo primero es respetar las normas e ir suave en carretera. Así, ante cualquier incidencia que pueda surgir, podrás realizar la maniobra que necesitas sin ningún tipo de riesgo. Dentro de este apartado también debes tener muy en cuenta el hecho de respetar la distancia de seguridad con el vehículo que te precede. De esta manera, un frenazo brusco que da origen al aquaplaning podrá terminar sin nadie perjudicado.
- Frena con suavidad: En el anterior punto ya hemos tocado el temido aquaplaning. Para conducir de forma segura con lluvia es clave que frenes lo menos posible y que, cuando lo hagas, pises el pedal de tal manera que la frenada sea completamente progresiva y controlada.
- Gradúa la intensidad del parabrisas: Aunque pueda parecerte una obviedad, son muchos los conductores que no terminan de dar la suficiente importancia a este elemento que hace que el agua se vaya de forma correcta de la luna del coche. Si no se actúa bien, la visibilidad disminuye de forma clara y eso te pone a ti y a los demás en peligro. No vale la excusa de que molesta para ver la carretera. Lo primero es la seguridad.
- Vigila los neumáticos: Si las ruedas ya han dado todo de sí y han perdido el dibujo, tienen menos agarre al asfalto y, por tanto, existe más riesgo de aquaplaning y de que el coche se vaya de la carretera ante un movimiento más brusco de lo habitual.
Conducir de forma segura con lluvia es fácil si pones de tu parte. Toma nota de cara al otoño, una época en la que comienzan a aumentar las precipitaciones.
